Si deambulas por las calles de Attezi (término mazahua difícil de traducir), conocerás sus diferentes ámbitos en unas cuantas horas, lo que no significa que ahí termine tu paseo, pues en las inmediaciones de la cabecera municipal hay varios parajes propicios para entregarte a sanas caminatas y sanas reflexiones.
Existe un trayecto fabuloso entre ocotales y pinos altísimos. Cuando llegues al mirador detente. Desde la atalaya verás la torre y la cúpula del templo de La Asunción, del siglo 16. Una vez que has vagado desde las alturas sobre la centenaria villa, lo harás paso a paso por sus calles para rematar en El Salto, cuyas aguas caen desde una altura cercana a los 60 metros. Como la caída se encuentra en propiedad privada sólo se accede a su prodigio los sábados. Se determinó como reserva ecológica de la monarca a una zona que abarca 16 mil 110 hectáreas localizadas entre los municipios de Ocampo, Angangueo, Zitácuaro y Contepec, en Michoacán, y los municipios de Donato Guerra, Villa de Allende, Temascalcingo y San Felipe del Progreso, en el Estado de México.